Apoyo latinoamericano en la apelación de Argentina por la estatización de YPF
Brasil, Uruguay, Ecuador y Chile han presentado escritos ante la Justicia de Estados Unidos, brindando apoyo a Argentina en su apelación por la estatización de YPF. Solicitan que un tribunal de apelaciones revierta el fallo de la jueza Loretta Preska, que ordenó a Argentina pagar US$16.000 millones al fondo Burford.
Estos cuatro países latinoamericanos presentaron dos documentos “amicus” ante la Corte de Apelaciones del Segundo Circuito de Nueva York, el tribunal de segunda instancia que está tratando la apelación argentina a la sentencia de Preska. Estos documentos, representan el primer respaldo internacional del reclamo del gobierno argentino.
Estas naciones han expresado su crítica al fallo de Preska, y se han mostrado “profundamente preocupados” y “alarmados” por la decisión de la jueza.
Cuestionamiento de la jurisdicción del caso
En los documentos presentados, Brasil y Uruguay señalan su inquietud porque el Tribunal de Distrito interpretó incorrectamente las doctrinas diseñadas para garantizar el respeto de las prerrogativas de los soberanos extranjeros y sus tribunales. Ambos gobiernos consideran que los tribunales de Argentina, y no los de Estados Unidos, son el foro adecuado para resolver este asunto, en respaldo a la postura del gobierno argentino.
Asimismo, señalan que Preska prosiguió con el caso, privando al poder judicial argentino de la oportunidad de determinar por sí mismo la interpretación y el efecto adecuado de sus propias leyes. Brasil y Uruguay sostienen que la población de la región no debería tener que soportar las consecuencias económicas de una sentencia que malinterpreta flagrantemente la ley vigente, emitida por un tribunal que nunca debió ejercer jurisdicción en primer lugar.
Preocupaciones de Chile y Ecuador
Chile y Ecuador han presentado un escrito similar en apoyo a los argumentos presentados por los abogados de Argentina para revertir el fallo de Preska. Ambos países indican que tienen un interés concreto en el caso, y están “alarmados” por la decisión tomada por la jueza.
Estos países sostienen que el fallo de Preska, si se mantiene, interferirá con las expectativas de largo plazo de las naciones soberanas de que sus propios juzgados o tribunales sean el árbitro de las disputas corporativas que surjan bajo sus propias leyes. Además, si no se modifica, “el fallo del Tribunal de Distrito amenaza con perturbar las relaciones comerciales de larga data entre las naciones soberanas y sus residentes corporativos y los Estados Unidos”, agregaron.
Chile y Ecuador también expresan su alarma por la falta de deferencia debida de Preska a las interpretaciones que Argentina hace de sus propias leyes. Este hecho, si se aplica a las naciones soberanas, puede resultar en una falta de respeto similar a las presentaciones y al ejercicio de jurisdicción de las naciones soberanas sobre disputas que, según las leyes de las naciones soberanas, deberían resolverse en sus propias cortes o tribunales.