Difícil proceso legislativo: Rodrigo de Loredo y su enfoque sobre el frustrado proyecto de ley de Javier Milei
La cara de Rodrigo de Loredo es un claro reflejo de su agotamiento y descontento. Después de cuatro días de arduas deliberaciones que se extendieron por más de treinta horas, finalmente, no se logró ningún resultado concreto: el proyecto de ley integral de Javier Milei deberá ser reevaluado en las comisiones y recomenzar su proceso legislativo.
De Loredo, legislador de Córdoba, también expone sus discrepancias con el gobernador de su provincia, Martín Llaryora. Asegura que Llaryora ha cedido a un enfoque de concesiones mutuas, una estrategia que, según De Loredo, los líderes de su partido se han negado a adoptar.
Las críticas de De Loredo a la gestión del gobierno
El contratiempo con el proyecto de ley en el Congreso ha provocado reacciones airadas por parte del gobierno. De Loredo, como presidente del bloque radical, manifiesta su preocupación y remarca: “Nada bueno puede surgir de un enfoque punitivo y divisivo como el que plantea el Presidente de la Nación”. Asegura que su grupo político ya había expuesto sus diferencias con el gobierno, y que estas estaban “sobre la mesa”.
De Loredo recibió a LA NACION en su oficina en el Palacio Legislativo, donde se pueden observar retratos de Umberto Illia y Ricardo Balbín. Luego de la entrevista, y antes de romper en llanto durante otra entrevista televisiva, lamentó el fracaso del proyecto de ley del gobierno y reafirmó la naturaleza reformista de los radicales.
La reacción de De Loredo ante la falta de avance del proyecto de ley
Para De Loredo, los acontecimientos durante la sesión fueron excepcionales, provocándole desconcierto, tristeza, y frustración. Señala que su grupo político trabajó arduamente para crear una ley que contribuyera al país, y se siente frustrado por la falta de progreso. Asegura que los radicales permitieron que el proyecto de ley se discutiera durante un período extraordinario y que fueron los más rápidos en presentar una disidencia sustancial. Aun así, aprobó el texto en general y estableció un precedente parlamentario para permitir la votación por incisos.
De Loredo considera que el fracaso del proyecto de ley durante la sesión se debió a la impericia y falta de experiencia política del gobierno. Él les había aconsejado que evitaran la lógica del “todo o nada” y que no confiaran en los gobernadores peronistas. Según De Loredo, los radicales nunca cedieron a un juego de concesiones mutuas, mientras que otros gobernadores, como el de Córdoba, Martín Llaryora, aparentemente adoptaron un enfoque diferente.
El futuro incierto del proyecto de ley y la postura de De Loredo
De Loredo cree que fue un error devolver el proyecto de ley a la comisión, pero admite que los radicales no podían insistir en su tratamiento si el propio autor solicitaba retirarlo. Asegura que no recibieron ninguna explicación sobre por qué el gobierno tomó esa decisión.
Lamenta la lógica violenta y divisiva que ha planteado el Presidente de la Nación, señalando que esta estrategia no es nueva y que Argentina ya ha sufrido las consecuencias de tales enfoques en el pasado. Menciona que las disputas con los gobernadores solo conducen a la creación de cuasimonedas y al aumento de los Ingresos Brutos, perjudicando a la sociedad.
De Loredo aclara que, a pesar de las diferencias evidentes en el recinto, el bloque de la UCR se mantiene unido. Asegura que no habrá ninguna división y que el radicalismo seguirá luchando contra los populismos.
