Posible reformulación del área de Inteligencia luego de la renuncia de Silvestre Sívori a la AFI.
En el Gobierno se plantea la posibilidad de reformular el área de Inteligencia tras la renuncia de Silvestre Sívori a la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), que a partir de ahora reportará directamente al Presidente. Con Javier y Karina Milei fuera del país, se espera que Santiago Caputo, asesor del Presidente, tenga una influencia importante en esta reestructuración.
Según fuentes cercanas al Gobierno, la reforma podría implicar dividir la AFI y separar la inteligencia interior de la exterior en diferentes estructuras. Sin embargo, la AFI fue creada por ley y sus atribuciones no suelen ser modificadas mediante un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU). Es posible que el Gobierno designe por DNU a un nuevo interventor, quien podría tener la facultad de modificar la estructura orgánica de la central.
La administración de la AFI estaba a cargo de Silvestre Sívori, designado por Nicolás Posse. La salida de Posse se produjo en medio de acusaciones de supuesto espionaje interno y de una disputa de poder en el manejo de las fuerzas de defensa y seguridad. Ante estas situaciones, Guillermo Francos, el nuevo jefe de Gabinete, anunció una reestructuración del área de inteligencia, que dependerá exclusivamente de la Presidencia.
El saneamiento de la central de inteligencia es una promesa recurrente en cada cambio de gobierno. A pesar de estar intervenida desde hace más de cuatro años, las prácticas de espionaje interno y la filtración de información secreta parecen persistir. Además, se han señalado la existencia de agencias de inteligencia privadas que operan sin control alguno.
Durante los primeros seis meses de la gestión libertaria, la AFI operó sin controles debido a que la Comisión Bicameral de Fiscalización y Seguimiento de los Organismos de Inteligencia no se conformó. La falta de supervisión activa sobre el desempeño de la central de espías permitió que operara con controles relajados.
La salida de Sívori se produjo en buenos términos, incluso con personas que tuvieron diferencias con Posse, como Santiago Caputo y Karina Milei. A pesar de esto, aún no ha habido una comunicación oficial sobre la reforma del área de Inteligencia.