La economía argentina en 2023: Brecha creciente entre inflación y salarios
El último año de la administración de Alberto Fernández vio cómo los bolsillos de los argentinos se adelgazaban aún más desde el comienzo de su mandato. El índice general de salarios registró un crecimiento de 152,7% en 2023, una cifra que se queda atrás en comparación con la inflación anual, que subió a 211,4%.
Análisis de la disparidad salarial entre trabajadores registrados y no registrados
La situación empeora cuando se examina el desglose por sectores. Los trabajadores no registrados se ven particularmente afectados, un patrón que ha sido constante en los últimos años. Este sector experimentó un aumento salarial de solo 115,3% en 2023, quedando casi 100 puntos atrás en comparación con la inflación anual. Es importante tener en cuenta que las estadísticas del sector informal tienen un retraso de seis meses.
Especialistas económicos opinan sobre el desplome salarial
Jorge Colina, director del Instituto para el Desarrollo Social Argentino (Idesa), opina que los trabajadores informales son los más afectados, con una disminución real de sus salarios del 30% en 2023. Según Colina, estos salarios ya eran bajos, por lo que ahora se están ganando en términos reales menos de la mitad de lo que se ganaba en 2017. Según él, esto ilustra cómo el ingreso real ha disminuido constantemente en los últimos seis años, con los trabajadores no registrados sufriendo la mayor caída.
En lo que respecta a los trabajadores asalariados formales, Colina señala que vieron una caída real de sus ingresos del 15% en 2023, que se suma a la pérdida de poder adquisitivo que ya venían sufriendo. “En 2022 ya estaban un 15% por debajo de 2017, que es cuando comenzó esta crisis cambiaria que estamos experimentando”, explica el especialista.
Nadin Argañaraz, director del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), señala que, si se toma en cuenta la variación interanual real de los salarios, se observa una caída del 20,2% en el sector público, del 14,7% en el privado y del 31% en el sector informal. “Este último es el que más ha sufrido la pérdida de poder adquisitivo en los últimos años”, resalta el economista.
El análisis comparativo realizado por el Iaraf concluye que, entre enero de 2018 y diciembre de 2023, los trabajadores formales privados perdieron el equivalente a 10,5 sueldos; los trabajadores públicos, el equivalente a 12,4 sueldos; y los trabajadores informales, el equivalente a 19,1 sueldos.
Según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), el sector privado registrado tuvo un aumento del 11% en diciembre, cerrando el año con un aumento del 165,8%. En el sector público, esas cifras fueron del 5,5% y el 148,6% respectivamente; mientras que en el sector informal, fueron del 7,6% y el 115,6%.
Christian Buteler, analista financiero, apunta que estos datos están en línea con lo que revela la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (Ripte). “Son cifras que hablan por sí solas. El mejor sector, que es el registrado privado, tuvo un aumento del 165,8% frente a una inflación del 211%, pero a los trabajadores estatales les fue peor y a los informales, mucho peor. Creo que fue uno de los años en los que más cayó el ingreso por salario desde el regreso de la democracia”, señala el experto.
Guadalupe Birón, economista de la consultora Empiria, señala que, aunque los salarios reales han estado cayendo durante años, en 2023 la tendencia se acentuó fuertemente. “Los salarios cerraron con una caída real del 16,7%. La pérdida del sector privado fue del 14,7%, mientras que el sector público cerró el año con una caída del 20,2%”, explica la especialista.
En el caso de los trabajadores registrados, si se amplía la visión histórica, habría que retroceder hasta 2002 para encontrar un índice peor, según el Ripte. Un cuadro de la consultora 1816, publicado en la red X por Buteler, lleva el comentario adjunto: “¿Qué está barato en Argentina? Los salarios, ¿alguna duda? Y estos son salarios de trabajadores privados estables, imagínense lo que es un monotributista o un trabajador informal”.
Con respecto a la variación de diciembre, Birón subraya que los salarios aumentaron un 8,9% mensual, muy por debajo de la inflación, que fue del 25,5% en el mismo mes. “Fue un mal año para el sector registrado. A nivel mensual, registró la mayor caída del salario real del año (-13,1%), impulsada principalmente por el sector público (-15,9%), aunque también por el sector privado (-11,5%)”, detalla la economista.