Esta semana, ¡boom! Wanda Nara confirmó su separación de Mauro Icardi. Y claro, como siempre, la prensa y todos nosotros no podemos evitar las dudas y las especulaciones. ¿Será esta separación real o simplemente otra movida mediática? Siempre nos tienen en vilo.
Pero bueno, en medio de todo este drama, quien no se quedó callado fue el amigazo de Wanda, Kennys Palacios. El estilista no se guardó absolutamente nada y soltó la lengua. ¡Y cómo!
En una entrevista, le preguntaron si esta separación tenía algo que ver con el lanzamiento del nuevo temazo de Wanda, “Ibiza”. Y él fue claro como el agua, nada que ver. Resulta que esto de las separaciones y lanzamientos no está relacionado. Así fue con “Bad Bitch”, con “O Bicho Vai Pegar” y con “Money”. ¡Cero drama!
Pero claro, todos queremos saber si esta separación es definitiva o si habrá una reconciliación épica. Y Palacios no tiene la respuesta. Él solo quiere que todo se solucione y que ellos dos hablen en su momento. Es cosa de ellos, ¡que lo arreglen como puedan!
Ah, pero la pregunta del millón llegó. ¿Wanda estaba llorando en esas fotos que se viralizaron? El estilista se lavó las manos y dijo que eso solo Wanda lo puede responder. ¡Ay, qué misterio!
Y mientras estamos en esto, ¿qué hay entre Wanda y L-Gante? Palacios asegura que son amigos y que eso de los besos en una fiesta es puro cuento. ¡Ni una foto ni un video! Así que nada de escándalos.
Y para rematar, le preguntaron si todo esto tenía que ver con “La China” Suárez, que lanzó su carrera como cantante. Pero Palacios, fiel amigo, defendió a Wanda y dijo que ella está más allá de todo. ¡Tiene un carrerón! Y bueno, ya sabemos que entre Wanda y “La China” hay historia, así que mejor dejar eso en el pasado.
Y si alguien se pregunta si Wanda encontrará el amor pronto, Palacios opina que no. Que el desamor se supera con amigos, familia y, claro, los hijos. No cree que ella necesite apurarse en buscar pareja. ¡Que viva su soltería!
No podemos negar que Wanda Nara siempre da de qué hablar. Estaremos atentos a cualquier novedad y, mientras tanto, ¡que siga la música!