El juicio a Lázaro Báez por presunta evasión fiscal comienza en Chaco
Lázaro Báez afronta cargos por evasión de millones de pesos
Finalmente, después de varios aplazamientos, Lázaro Báez se enfrenta a juicio en Chaco, acusado de presuntamente evadir decenas de millones de pesos provenientes de contratos de obra pública a través de una de sus empresas de construcción. De ser encontrado culpable, establecería el “delito anterior” de otras actividades delictivas, como la llamada “ruta del dinero K”.
Aunque actualmente se encuentra en arresto domiciliario en Buenos Aires, Báez estuvo presente en la primera audiencia oral a través de la plataforma Zoom. Esto contrasta con su socio en la empresa “Sucesores de Adelmo Biancalani”, el antiguo senador nacional por el Partido Justicialista, Fabio Biancalani, quien sí asistió a la sala de audiencias donde se lleva a cabo el juicio.
Sucesivas postergaciones y retrasos en la producción de pruebas
Las reiteradas postergaciones del juicio se debieron en gran parte a retrasos en la producción de algunas pruebas, incluyendo un peritaje en el Cuerpo de Peritos Contadores de la Corte Suprema de Justicia. Originalmente programada para el 20 de octubre, la fecha de inicio del juicio se retrasó varias veces hasta el 22 de este mes.
En la apertura del juicio, tanto Báez como Biancalani y otros acusados coincidieron virtualmente con el ex presidente de Austral Construcciones, Julio Mendoza, y otros condenados, el contador Claudio Bustos y el abogado Jorge Chueco.
Las acusaciones contra los cinco acusados se centran en las presuntas actividades delictivas realizadas a través de la constructora “Sucesores de Adelmo Biancalani”, las cuales habrían causado un perjuicio al fisco de decenas de millones de pesos.
Embargos impuestos a los acusados
Báez, Mendoza, Bustos y Biancalani llegaron al juicio con embargos por $52 millones cada uno, con el objetivo de cubrir la cifra que la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) estimó hace años que habrían evadido en impuestos a las Ganancias e IVA mediante el uso generalizado de facturas falsas. Chueco, por su parte, enfrenta un embargo de $3 millones.
Para Báez, quien ya acumula dos condenas penales en los casos “Vialidad” y “ruta del dinero K”, y para Mendoza y Bustos, esta investigación en Chaco representa una de las tres grandes investigaciones judiciales que han enfrentado por la presunta evasión fiscal multimillonaria durante las presidencias de Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner.
La AFIP, que participa en el proceso como querellante, realizó la denuncia inicial que desencadenó el caso. El juez federal subrogante, Enrique Bosch, procesó a Báez y a los demás acusados en septiembre de 2020, a petición del fiscal federal Patricio Sabadini.
La investigación realizada por la AFIP detectó irregularidades y presuntos delitos multimillonarios al revisar los libros contables de la constructora “Sucesores de Adelmo Biancalani”. La evidencia recogida se centró en operaciones interempresariales con facturaciones importantes por servicios que no pudieron ser demostrados.
Es crucial recordar que los resultados de este juicio en Chaco serán decisivos para la estrategia defensiva de Báez. Esto se debe a que el tribunal que lo condenó en Buenos Aires por la “ruta del dinero K” argumentó que el origen de esos fondos fue el fraude fiscal de las fortunas que recibió de la obra pública, haciendo múltiples referencias a lo sucedido en el territorio de Chaco.
Las audiencias del juicio se llevarán a cabo una vez por semana y se espera que dure hasta el primer semestre de 2024.