La reforma de las jubilaciones dentro de la Ley Ómnibus, un debate candente
El artículo 106 de la Ley Ómnibus, que plantea la suspensión de la actual fórmula de movilidad pensionaria y concede al Ejecutivo la facultad de actualizar las pensiones de manera discrecional, se avizora como el principal punto de discordia en las próximas discusiones legislativas.
Los bloques políticos más inclinados a respaldar la propuesta de Javier Milei se muestran firmes en su deseo de alterar dicho apartado del proyecto. Pretenden dejar por escrito que si se opta por un esquema sin fórmula, las prestaciones no perderán terreno frente a la inflación. Sin embargo, tanto la Casa Rosada como el Ministerio de Economía se resisten a introducir una cláusula de indexación.
“Está prohibida la indexación”, declaró esta semana un cercano colaborador del presidente, mientras se despejaba el panorama legislativo y comenzaban a surgir los aspectos más polémicos del proyecto.
Los reformistas y sus aliados
“Debe haber un límite a la discrecionalidad del Ejecutivo para que los jubilados no pierdan frente a la inflación. Y si se está trabajando en una nueva fórmula de movilidad, debemos comprometernos a que llegue al Congreso en un plazo determinado”, expresó la diputada por Santa Fe, Germana Figueroa Casas (Pro), durante el debate en la comisión plenaria.
Un diputado de Pro que forma parte del grupo que sigue a Patricia Bullrich -la facción más proclive a apoyar al Gobierno- advirtió: “Si quieren que la ley se apruebe, tendrán que modificar este apartado. Están políticamente en contra de las indexaciones. No sé qué término usarán, pero tendrán que cambiarlo”.
Por su parte, el bloque del radicalismo en Diputados emitió el viernes por la noche un comunicado en el que manifestó: “Rechazamos la suspensión de la movilidad jubilatoria, ya que esta medida perjudica a nuestros jubilados y pensionados, que ya vienen sufriendo mucho. Consideramos que es prioritario proteger sus ingresos de la inflación”.
La perspectiva del Ministerio de Economía
El Gobierno aún no tiene en su agenda una nueva fórmula de movilidad. Esto significa que se desconoce por cuánto tiempo el Ejecutivo pretende actualizar las prestaciones sin un cálculo predefinido. En el equipo de Milei se apoyan en los perjuicios que viene causando la fórmula actual y en que las compensaciones mediante bonos que se han concedido también responden a una actuación “discrecional”.
Así, aseguran que con el nuevo esquema se protegerá el poder adquisitivo de los jubilados, aunque no detallan cómo. Destacan que se cuidará “en particular” a los beneficiarios con ingresos más bajos, lo que sugiere que los incrementos no serán iguales para todos.
Fuentes del Ministerio de Economía señalaron a LA NACION: “La propuesta del Gobierno es suspender esta fórmula perjudicial para los jubilados y, mientras se establece la nueva fórmula, realizar incrementos periódicos para proteger el poder adquisitivo de los jubilados, con prioridad para los beneficiarios de más bajos ingresos”.
Un alto colaborador de la Casa Rosada recalcó: “La indexación de las pensiones no sirve. Anteriores gobiernos ya lo intentaron y no lo cumplieron”.
Un diputado de un bloque aliado señaló: “La ley con un cheque en blanco en materia de jubilaciones no va. Si no quieren establecer una indexación mensual por inflación, queremos saber por qué”.