El arte de cumplir metas: más allá de las resoluciones de Año Nuevo
Para una gran cantidad de personas, las resoluciones establecidas al comenzar el año se difuminan rápidamente, olvidadas antes de que llegue marzo. Aunque comenzar el año con ímpetu y entusiasmo por mejorar es común, mantener ese impulso puede ser extremadamente desafiante.
Jim Kwik, autor de “Edición ampliada ilimitada: mejora tu cerebro, aprende cualquier cosa más rápido”, cuestiona la efectividad de establecer metas en una fecha arbitraria como el 1° de enero. Sugiere que en lugar de ser verdaderos compromisos, las resoluciones de Año Nuevo terminan siendo simples intenciones.
Michelle Rozen, autora del futuro libro “El club del 6%”, ha trabajado con grandes empresas durante más de diez años, entrenando a líderes en motivación. Ha observado que, aunque las personas suelen tener el deseo de mejorar, a menudo no logran mantener el esfuerzo cuando llega el momento de hacerlo.
Los seis secretos de los logradores de metas
A pesar de la tendencia a abandonar las resoluciones, Kwik y Rozen han identificado características comunes en las personas que logran mantener su compromiso.
1. Enfocarse en un solo objetivo
Aquellos que logran cumplir sus metas tienden a limitarse a un solo objetivo, en lugar de abrumarse con muchas metas simultáneamente. Seleccionar un objetivo y dedicarse a él durante 30 días puede facilitar la formación de un nuevo hábito.
2. Establecer metas específicas
Las metas claras y específicas son un sello distintivo de las personas que cumplen sus propósitos. En lugar de establecer metas amplias y abstractas, es más efectivo ser detallado y preciso.
3. Fragmentar el objetivo en hitos manejables
Las personas exitosas en cumplir sus propósitos suelen dividir sus grandes metas en hitos más pequeños y manejables. El enfoque gradual puede ser menos abrumador y promover la consistencia en los esfuerzos.
4. Desarrollar un ciclo de hábitos
Para que las resoluciones tengan éxito, deben encajar en un ciclo de hábitos, que incluye un indicador, una rutina y una recompensa. Celebrar los logros, incluso los más pequeños, puede reforzar el hábito y aumentar la probabilidad de mantenerlo.
5. Comprender la importancia del objetivo
Para cumplir una meta, es importante no solo conocer qué se desea cambiar, sino también entender por qué esos cambios son importantes. Comprender el ‘por qué’ detrás de un objetivo puede aumentar significativamente la motivación y el compromiso.
6. Creer en uno mismo
Las personas que logran alcanzar sus metas tienden a tener una visión optimista de la vida, lo que les ayuda a cumplir sus metas año tras año. La confianza personal juega un papel crucial en este proceso, proporcionando el impulso necesario para alcanzar metas futuras.