Francisco Reynaldo Paco Urondo nació en Santa Fé, el 10/1/1930.
Escritor, poeta, periodista, militante político, revolucionario.
Poesía, cuentos, una novela, teatro, guiones de cine…
El libro “La Patria Fusilada”, editado por la revista Crisis surgió del reportaje que en la cárcel de Devoto les hiciera Paco a las tres personas sobrevivientes de la Masacre de Trelew ocurrida el 22 de agosto de 1972: María Antonia Berger, Alberto Camps y Ricardo Haidar. El libro se editó en 1973. Y hablando de patria fusilada, tres años después un 24 de marzo fatídico se iniciaría la dictadura militar, cívica y eclesiástica.
A Paco la cúpula de Montoneros lo envió a Mendoza a pesar suyo y un 17 de junio mientras manejaba
por las calles de Guaymallén junto a su compañera Alicia Raboy, Ángela, la hijita de ambos, de 11 meses y una militante, la Turca, fueron perseguidos por un auto con hombres armados hasta los dientes. Se produjo un tiroteo y Paco fue ultimado a los 46 años de edad. Alicia corrió con Ángela en los brazos y se la entregó a un vecino para salvarle la vida. A su vez ella intentó escapar pero fué atrapada y nunca más se tuvo noticias de su persona. Una víctima más entre los y las 30.000
Ángela fue entregada a la Casa Cuna y sus familiares pudieron recuperarla. Hoy es poeta, ilustradora y pintora…
La Turca pudo eludir la emboscada y contó todo lo sucedido muchos años después en un documental llamado, Paco Urondo, la palabra justa. Ese título quizá haya surgido de una frase legendaria de Paco: “Empuñé un arma porque busco la palabra justa”. También supo decir, “Sé que futuro y memoria se vengarán algún día” y esta otra maravilla: “Estoy seguro de llegar a vivir en el corazón de una palabra”.
Recordemos una bella poesía de Paco que nos interpela a todos y a todas:
Mi tierra querida.
Ya es hora de perder la inocencia
ese estupor de las criaturas
que todavía no pudieron hacerse cargo
de la memoria del mundo al que recién nacieron.
Pero nosotros
hombres grandes ya
podemos olvidar sabemos perfectamente que
tendríamos que hacer para dañar el presente para romperlo.
Aquí nadie tiene derecho a distraerse, a estar asustado,
a rozar la indignación, a exclamar su sorpresa.
Hombre extraño este Francisco Reynaldo Urondo que tuvo la singularidad de decir bellamente lo que pensaba y hacer lo que decía. Un ejemplo de vida imprescindible para estos tiempos en que el decir y el hacer deben presentar los documentos para reconocerse…
Me despido con una frase del gigante Paco que sintetiza su concepción del mundo y el de toda esa generación inolvidable:
“Sin jactancia puedo decir que la vida es lo mejor que conozco”.
Enrique Indio Zabala es docente y militante. Fue fundador junto a otros compañeros y compañeras del Centro Cultural Enrique Santos Discépolo que dirigía Norberto Galasso.
Hoy participa en el programa “No se desesperen “ que conduce Fernando Borroni, en Radio 10.
Este texto fue dado a conocer ayer viernes 27 de octubre del 2023 en la columna que el Indio tiene en dicho programa.
